martes, 12 de noviembre de 2013

PUBLICACIÓN DEL DIARIO EL COMERCIO SOBRE MASONERÍA- 1929

Hace mucho tiempo, en el Perú no era común publicar noticias que tengan que ver con la masonería. 
La orden masónica en esa época permanecía muy cerrada e incluso no era muy vista por algunos grupos conservadores y religiosos. 
Es en este marco es que el Diario El Comercio, un 26 de Enero de 1928, publicaba, en gran formato, dos anuncios. El primero correspondía al SUPREMO CONSEJO DEL PERÚ y el segundo a la GRAN LOGIA DEL PERÚ. Ambos citaban a sus miembros: uno a Sesión Extraordinaria y el otro a Gran Asamblea; la Gran Logia además, “…invita a todos los Masones de Lima y el Callao”. Reunión a llevarse a cabo, para unos, “…en la casa de la Fraternidad y para los otros “… en el Templo de la Fraternidad” denominaciones que se le otorgan al local ubicado en la calle de Rufas, (Jiron Huanta) para el día domingo 29 de enero a las 10.30 de la mañana, en traje de calle para los miembros del Supremo Consejo y para las 10 a. m.
para los de la Gran Logia que, además, precisaba que “…ante la cual los jefes de la Orden firmarán el Tratado de Paz y Amistad". Ambos comunicados están datados: “Lima, 26 de enero de 1928”.
Alejandro Alayza y Paz Soldán
Con este feliz anuncio culminaba el anhelo de construir la unión de las instituciones masónicas de los primeros con los altos grados de la masonería y se coronaba los esfuerzos que los masones de todas las logias del Perú, destacando la Alejandro Alayza y Paz Soldán perseverancia del hermano  Alejandro Alayza y Paz Soldán en la ejecución de tan sólida obra. Hasta aquí la nota sorprendente de la publicación de este aviso. Ahora se detallará algo de lo que sucedió esa memorable noche.  Se menciona que en dicho local, ese día no había espacio para un masón más.
Transcribimos algunas frases mencionadas ese día, del libro “BREVE HISTORIA DE LA FRANCMASONERÍA Y DEL PACTO CELEBRADO ENTRE LA GRAN LOGIA DEL PERÚ Y EL SUPREMO CONSEJO DEL GRADO 33 DEL RITO ESCOCES” obra del hermano Alejandro Alayza y Paz Soldán. Asi comienza su discurso el hermano Carlos H: Hartmann, quien dirigía en ese año el Supremo Consejo del Perú.....“Todo masón nato es un luchador consciente o inconsciente. En cuanto ingresa a una Logia se une a sus camaradas y hermanos de aspiraciones. Indaga con ellos en el recinto insondable de la naturaleza. Investiga junta o separadamente en el mundo espiritual, y se siente orgulloso después, cuando creyendo haber descubierto una verdad, la puede poner a la disposición de sus hermanos y de la humanidad entera".
"……Entonces, los conquistadores de esta verdad, cumpliendo la consigna de ayudar a sus hermanos menos avanzados, retroceden para alcanzarlos, procuran hacerse comprender y acuden a la figura más simple, el triángulo, pasando de esta manera a la segunda dimensión e inscribiendo a los lados de ese triángulo las tres palabras: Generación, Conservación y Transformación, porque estas son las manifestaciones eternas del absoluto en el mundo concreto, simplemente simbolizado por el cubo, la forma más primitiva, primer símbolo de la masonería en el grado de Aprendiz. De vuelta al mundo concreto los masones hacen comparaciones, contemplan la forma más perfecta, el cuerpo humano, lo estudian, lo analizan y luego deducen lógicamente de que ese cuerpo es la forma más acabada para la expresión concreta de la divinidad y le dan el nombre de Templo de Dios……"
Continúa diciendo ".....Que las luces de la Libertad, de la Igualdad y de la Fraternidad os guíen en vuestro camino son los votos que el Supremo Consejo hace hoy por la conservación de la masonería simbólica del Perú".
La Asamblea plena, cargada de emoción, prorrumpe en sonoros, entusiastas y extensos aplausos; acallados los mismos, en medio del silencio, se yergue la figura del hermano Benjamín Pérez Treviño, quien era en ese momento Gran Maestro de la Gran Logia del Perú del Perú, para esparcir su palabra, con toda propiedad, en bien general de la Orden y responde un discurso que quedará para la historia masónica, donde transcribimos unos párafos:
Benjamín Pérez Treviño
"Es el clamor unánime de paz y concordia; de fraternidad sin reservas, ni vistas al pasado; de unión indestructible entre todos los hombres que en el Perú profesamos la doctrina masónica, que es una, sólo una e inmutable, sea cual fuere el Rito en que se nos revele, el pedazo de tierra en que proclamamos sus excelencias o el grado en cuya leyenda la veremos".
Benjamín Pérez Treviño
"Yo me inclino, emocionado en lo más íntimo, en lo más hondo de mi espíritu, ante esa actitud magnifica de la nueva generación masónica de mi Patria. Como viejo servidor de nuestra Augusta Institución que ya tocando la cumbre de una sublime realidad, el más cálido anhelo de su vida, y como personero de la Gran Logia del Perú, cuyo pensamiento y afán nobilísimo voy a tener la dicha de manifestaros en seguida, yo os tributo, el homenaje de mi admiración por este hermoso resultado de vuestros esfuerzos y por la perseverancia y energía con que habéis sabido perseguirlo".
"No debo referirme aquí a las alternativas de esperanzas y desfallecimientos de avances halagadores y nuevas dificultades a que la noble empresa ha estado sujeta, como toda obra humana. Sólo me corresponde hacer notar que gracias a la fe y acierto que pusieron en ella los meritísimos hermanos que han sido el alma de este movimiento ascensional y cuyos nombres, que os son perfectamente conocidos, han de figurar en páginas preferentes de la Historia de la Masonería Peruana. Ha llegado esta hora, de enorme trascendencia, unidas, debe ser pronunciada por los personeros de ambos Cuerpos Supremos, acerca de la decisión final adoptada por ellas, en cabal acuerdo con el espíritu de la Institución y con sus conveniencias primordiales".
"Muy queridos hermanos apartemos un momento nuestras miradas de esta morada transitoria y pensemos en la lucha heroica que con menos fortuna que nosotros, sostuvieron nuestros padres en el culto a la luz, por la conquista del ideal que nosotros hemos realizado".
Emocionados, fraternos y prolongados aplausos inundan el Templo, cubriendo de emoción el corazón de los presentes. Se restablece el silencio. De un estuche rojo y otro azul, ambos Grandes Dignidades extraen los documentos que contiene el Pacto de Paz y Amistad que, previamente, había sido acordado por las respectivas comisiones.
A los acordes del Himno Nacional del Perú se procede solemnemente a ser firmados, refrendados y sellados por ambas Potencias, canjeándose los documentos mutuamente. Luego, el hermano Gran Secretario procede con voz firme y emocionada a darles lectura. La Armonía y la Fraternidad hacen historia. El registro escrito de este importante acto fue realizado  por la fraterna mano del hermano Enrique Maravoto Goytizolo.
Ivo Pino Ramos
maestro masón
Logia Honor y Lealtad N° 200

Basado en el Documento XI-16 del Instituto Histórico "Jorge Basadre" de la Gran Logia del Perú.
Documento completo comunicarse aquí. (Asunto: DIARIO)
Lineas abajo, año 1929, fotos del Templo de la Fratenidad ubicado en el Jirón Huanta, Barrios Altos; más conocido como el Templo de Rufas. 


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